Tom Petty and The Heartbreakers – “Mojo” (2010) y otras cosas.

Entré en la tienda y eché un vistazo a las revistas. Vi una portada con un melenudo y pensé –“esto es lo mío”-. La revista era el This is Rock, y el melenudo, del que decía ser “Uno de los Grandes Iconos del Rock Americano”, era Tom Petty.

Tom Petty..., me suena pero..., no caigo, oiga.

¿Quién carajo será Tom Petty?

Evidentemente, es el tío de la foto, me contesté a mí mismo en plan socarrón.
Por un momento creí autoconvencerme, pero rápidamente me asaltó la siguiente e inevitable pregunta.
¿Y qué música hace Tom Petty?

Miré a un lado, miré al otro, me sonrojé a gusto un ratito, compré la revista y me fui, dispuesto a escuchar sus discos en cuanto pudiese y a llenar ese vacío cultural que se me había creado de repente.

Pues ya está, ya he escuchado todos sus discos, ahí va la valoración.

Tom Petty hace lo que en Europa llamamos rock americano y en USA llaman simplemente rock. El rock americano, a mi modo de ver, es ese batiburrillo de rock ligerete con una buena dosis de country y algo de blues, apto para todos lo públicos, con buenas letras y buenas composiciones (léase Bruce Springsteen, “El Gran Icono del Rock Americano"). En sus principios, allá por 1976, el año en que publicó su primer disco, Tom Petty llevaba un rollo bastante estoniano, aunque más ligero, pero poco a poco se fue creando un sonido y un estilo propios.

Los discos son todos buenos y agradables de escuchar, y muchos de ellos tienen una factura muy diferente. Te puedes encontrar discos muy ligeros, llenos de canciones ideales para cantar alrededor de un fuego, pero también otros con mucho ritmo y fuerza.

En la revista recomendaban toda su discografía, pero hacían un especial inciso en estos discos:
“Damn the Torpedoes” (1979)
“Full Moon Fever” (1989)
“She’s the One” (1996)
Pero como siempre pasa, mi selección es otra, lo curioso es que esta vez hay una coincidencia. Es ésta:
“Hard Promises” (1981)
“Full Moon Fever” (1989)
“Mojo” (2010)

Tom Petty es un músico de los auténticos, de los buenos, de los que SIEMPRE están componiendo, y SIEMPRE tienen buenas ideas. Si no fuese así no editaría nada, no es de los que sacan discos porque sí. Es de esos músicos que tuvieron su gran éxito en épocas pasadas, pero no porque su música fuera mejor entonces, sino por cuestiones de mercado. El disco que más me ha gustado, y con diferencia, es el último, “Mojo”. Seguramente no tendrá el exitazo de “Full Moon Fever”, porque no es su momento, pero musicalmente (repito, a mi modo de ver), es mucho mejor que cualquier cosa que haya hecho.

“Mojo” es un disco perfecto, con un sonido depuradísimo, con quince buenísimas canciones de muy diferentes hechuras, con muchísimos momentos muy brillantes, con patrones rítmicos, armonías y melodías de una calidad altísima. Pero lo que más me gusta es que no hay ni una nota de más, es muy sencillo en su sonido, cada instrumento se puede escuchar a la perfección. Un gustazo. Atención especial a la guitarra solista, hay unos cuantos solos de esos que te quitan el hipo, pero con muy pocas notas, puestas justo en el momento apropiado.

“Mojo” es básicamente rock, pero se puede encontrar bastante blues, mucho más que en cualquiera de los discos de Tom Petty, y también algo de jazz, pequeñas trazas que le dan un aire estupendo al conjunto. Incluso hay un tema, “Don’t pull me over”, con un rollo reggae muy cálido y rítmico que te hace cabecear ligeramente al ritmo. Delicioso. De las quince canciones se pueden encontrar por lo menos siete u ocho delicatessen del nivel de “Don’t pull me over”, pero determinar cuáles son ya es faena del que sienta curiosidad por escucharlo. Yo, por supuesto, se lo recomiendo a todo el mundo, sean cuales sean sus gustos musicales. “Mojo” es una genialidad de un músico que nunca ha dejado de aprender y evolucionar y que ha plasmado todos esos conocimientos en un álbum fantástico con mucha sencillez. Un diez para Tom Petty. Y otro para The Heartbreakers.