
Lo más gracioso es que no se dio cuenta nadie, ni la presentadora, que decididísima entrevistó al batería como si realmente hubiese cantado él, éste interpretó a la perfección su papel mientras los otros dos se fueron del escenario para desternillarse a gusto de risa fuera del alcance de las cámaras.
Un diez por Muse.
Espero con ansiedad su nuevo disco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario